No es nuestro objetivo informar de lo que pretende la patronal en el convenio, ni mucho menos la dirección de nuestra empresa; si quieren informar directamente que editen una circular.
Nosotros queremos resaltar la “tranquilidad” de llevar más de seis meses sin convenio, y sin apenas reuniones para negociarlo. No es de recibo que nadie, ni los grupos que ostentan la mayoría de la representación sindical (los amarillos), ni las personas afectadas y que trabajamos en las empresas del sector, digan ni hagan nada.
Ahora, eso sí, nos dicen que cambiemos el turno de vacaciones de julio porque NO LES DA LA GANA CONTRATAR A NADIE de refuerzo, y lo cambiamos. Como no hay plantilla suficiente en ningún departamento, nos proponen doblar turno, y vamos y lo doblamos. Nos proponen cinco días de trabajo en las tiendas a los que no lo somos a cambio de 60 € y días de descanso, porque no hay plantilla suficiente, y vamos todos y todas corriendo a la tienda.
¿Qué esperamos haciendo este tipo de favores, trabajando por el morro?. El día que a la patronal le interese no dudará en deshacerse de nosotros, como a esas compañeras que estando de excedencia no les permiten reincorporarse. A la patronal no le temblará el pulso a la hora de firmarnos un mal convenio, o deshacerse de nosotros si les conviene.
La negociación del convenio es un momento determinado de un proceso, si nosotros, los trabajadores y trabajadoras del sector actuamos diariamente aceptando cualquier cambio (bueno o malo, aunque siempre en beneficio de la dirección de la empresa) el convenio siempre será un acuerdo donde la mayor parte de tajada estará en el plato de la patronal.
Si en las elecciones sindicales sólo pensamos en salvarnos nosotros individualmente, y votamos a esos engendros sindicales que la dirección de la empresa ha gestado (otra vez los amarillos), luego tenemos estos convenios que, año tras año, nos quitan o empeoran nuestras condiciones laborales.
En definitiva, no esperemos un buen convenio sin haberlo peleado, puesto que nuestra patronal está haciendo todos los esfuerzos para que la crisis le afecte lo menos posible y pueda luego recuperar todo el beneficio que no ha tenido en este tiempo.
El último domingo de agosto se reunirá Isidoro con la junta de accionistas para, una vez más, llorar por los beneficios que no han tenido, pero para proponer medidas de ahorro que nos afectarán directamente a quienes de verdad generamos los beneficios de esta empresa.
Luego en septiembre se volverá a reunir la mesa del convenio y nos trasladarán, aún más, peticiones sobre nuestro salario y nuestras condiciones laborales para incrementar sus beneficios. Y nosotros apoyando, mayoritariamente, a quienes les sirven en este juego, a fasga y a fetico, a los amarillos.
Acabemos con esta farsa, infórmate y organízate con quien sí defiende los intereses de los trabajadores y trabajadoras del sector.
Nosotros queremos resaltar la “tranquilidad” de llevar más de seis meses sin convenio, y sin apenas reuniones para negociarlo. No es de recibo que nadie, ni los grupos que ostentan la mayoría de la representación sindical (los amarillos), ni las personas afectadas y que trabajamos en las empresas del sector, digan ni hagan nada.
Ahora, eso sí, nos dicen que cambiemos el turno de vacaciones de julio porque NO LES DA LA GANA CONTRATAR A NADIE de refuerzo, y lo cambiamos. Como no hay plantilla suficiente en ningún departamento, nos proponen doblar turno, y vamos y lo doblamos. Nos proponen cinco días de trabajo en las tiendas a los que no lo somos a cambio de 60 € y días de descanso, porque no hay plantilla suficiente, y vamos todos y todas corriendo a la tienda.
¿Qué esperamos haciendo este tipo de favores, trabajando por el morro?. El día que a la patronal le interese no dudará en deshacerse de nosotros, como a esas compañeras que estando de excedencia no les permiten reincorporarse. A la patronal no le temblará el pulso a la hora de firmarnos un mal convenio, o deshacerse de nosotros si les conviene.
La negociación del convenio es un momento determinado de un proceso, si nosotros, los trabajadores y trabajadoras del sector actuamos diariamente aceptando cualquier cambio (bueno o malo, aunque siempre en beneficio de la dirección de la empresa) el convenio siempre será un acuerdo donde la mayor parte de tajada estará en el plato de la patronal.
Si en las elecciones sindicales sólo pensamos en salvarnos nosotros individualmente, y votamos a esos engendros sindicales que la dirección de la empresa ha gestado (otra vez los amarillos), luego tenemos estos convenios que, año tras año, nos quitan o empeoran nuestras condiciones laborales.
En definitiva, no esperemos un buen convenio sin haberlo peleado, puesto que nuestra patronal está haciendo todos los esfuerzos para que la crisis le afecte lo menos posible y pueda luego recuperar todo el beneficio que no ha tenido en este tiempo.
El último domingo de agosto se reunirá Isidoro con la junta de accionistas para, una vez más, llorar por los beneficios que no han tenido, pero para proponer medidas de ahorro que nos afectarán directamente a quienes de verdad generamos los beneficios de esta empresa.
Luego en septiembre se volverá a reunir la mesa del convenio y nos trasladarán, aún más, peticiones sobre nuestro salario y nuestras condiciones laborales para incrementar sus beneficios. Y nosotros apoyando, mayoritariamente, a quienes les sirven en este juego, a fasga y a fetico, a los amarillos.
Acabemos con esta farsa, infórmate y organízate con quien sí defiende los intereses de los trabajadores y trabajadoras del sector.
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